Trucos para hacer fotos de nieve: La reflexión de la luz que se produce en la nieve es muy superior a la que suele ocurrir en cualquier otro momento. Al ser muy intensa la luz, el diafragma, puesto en modo automático, se cierra más de la cuenta, y entonces las fotos obtenidas salen subexpuestas, o sea, oscuras, con poca luz. Es el motivo por el que la nieve sales extrañamente sucia, con un color grisáceo. Lo mejor es desactivar el modo automático y calibrarla manualmente. Hay que subirle manualmente el valor de exposición en uno o dos puntos, según queramos que la nieve salga más blanca o no. Abrir un poco más el diafragma es lo más habitual. Cuando salen azuladas, hay que usar un filtro polarizado o ultravioleta. Hay un filtro muy usado que es el 80A, o bien, en caso de cámaras digitales, trabaja sobre el balance de blancos. Cuando la foto es con gente, hay que cerrar el diafragma más de la cuenta y usar flash de relleno, con las luces apuntando arriba, para que no se reflejen también en la nieve.
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